La Lucha del garrote, protagonista en las Fiestas Fundacionales de Las Palmas de Gran Canaria

La playa de Las Canteras acogió un torneo que acerca el noble arte marcial autóctono canario a la población más joven

Este pasado fin de semana, la Lucha del garrote volvió a poner de manifiesto que está más vivo y activo que nunca, con la celebración del Trofeo Fiestas Fundacionales de Las Palmas de Gran Canaria, que se desarrolló sobre la arena del mejor terrero posible, el de la playa de Las Canteras.

Chicos y chicas de las diferentes islas del archipiélago pudieron disfrutar del arte marcial autóctono canario, en una jornada inolvidable para todos los participantes.

Para Samuel Suárez, coordinador del Trofeo Fiestas Fundacionales, “la jornada ha sido muy positiva”, reconociendo el esfuerzo realizado por el ayuntamiento capitalino por “permitir volver a este evento a Las Canteras, que es el entorno ideal para celebrar este campeonato”. “Estamos muy contentos de volver a esta playa, y poder mostrar no sólo a los participantes nuestro deporte, sino también a todos aquellos que visitan la playa y pasean por la avenida”.
En cuanto al rango de edad de los participantes Pérez destaca que va “desde los más pequeñitos de 3 y 4 años, hasta la edad juvenil de 16, pasando luego a las categorías adultas”. Destaca además la presencia en esta nueva edición del campeonato de “una gran participación de gente proveniente de otras islas, lo que demuestra nuestro crecimiento en zonas en las que antes no había competición y eso ayuda a que este tipo de eventos siga creciendo y enganchen al público”.

Por último Samuel Suárez recuerda que para los ciudadanos de Las Palmas de Gran Canaria “el mes de mayo es un día de celebración, nosotros nos esforzamos durante todo el año para enseñar y promover esta tradición y cada vez, por suerte, tenemos que acudir a menos lu

gares ya que hay material y monitores y adultos celebrando sus exhibiciones sin tener que depender de la Federación Canaria de Lucha del Garrote, y eso a nosotros nos llena de orgullo, no solo transmitimos, sino que plantamos una semilla que continúa en el tiempo”

Comparte este artículo